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En 1875, Graham Bell, propicia el nacimiento de la telefonía. Este inventor consiguió que los sonidos pudieran propagarse a través de un cable.
Pero no solo la telegrafía y la telefonía intervinieron en la aparición de la radio. Otros fenómenos fueron igual o más importantes que éstos. El descubrimiento y la posterior medición de las ondas electromagnéticas, también llamadas Hertzianas porque la persona que ideó el proceso para medirlas fue Heinrich Hertz en 1887, propiciaron la creación del primer receptor de radio. Sin embargo, hasta la llegada de la telegrafía sin hilos, de la mano de Guillermo Marconi, la transmisión era muy limitada. La aportación de Marconi permitió que las señales sonoras pudieran propagarse a algo menos de 20 Kilómetros de distancia. Lógicamente, el sistema tenía sus imperfecciones, porque, por ejemplo, este aparato no podía transportar ni palabras ni sonidos musicales.
Hacia el año de 1900 se empezaron a utilizar los detectores de cristal de galena para la detección en sustitución del cohesor Branly, la galena era mucho mas sensible, pero aun inestable.
En España la estación pionera fue EAJ-1 Radio Barcelona, llamada la emisora decana de la radio española por ser, precisamente, la más antigua. Sin embargo, las primeras emisiones radiofónicas en nuestro país corrieron a cargo de Radio Ibérica de Madrid, a finales de 1923 y principios de 1924. Radio Ibérica surgió de la unión de la Compañía Ibérica de Telecomunicaciones y de la Sociedad de Radiotelefonía Española. Meses más tarde, Radio Madrid y Radio Libertad, haciendo uso de las infraestructuras de Radio Ibérica, emitían su programación, que se reducía a unos pocos espacios a la semana.
A pesar de los intentos anteriores, no será hasta 1924 cuando la radio en nuestro país empiece a emerger definitivamente, en plena Dictadura del General Primo de Rivera. Este mandatario, al igual que otros políticos, vio en este medio un efectivo canal de propaganda.
Dada la situación que se estaba viviendo en relación con un nuevo sistema de comunicación que despertaba el interés de todos e iba consolidándose a pasos agigantados, las autoridades, como puedes comprender, no podían ser ajenas y decidieron poner un poco de orden convocando lo que se vino a llamar la Conferencia Nacional de la Telegrafía Sin Hilos, que durante seis meses deliberó sobre el contenido del futuro Reglamento de Radiodifusión.
La utilidad de este medio radica en su valor estratégico de la comunicación sin hilos y sirve para mantener el carácter reservado de las comunicaciones.
Puede emitir retransmisiones en directo de cualquier tipo de acontecimiento porque tiene una amplia parrilla de géneros radiofónicos como son el reportaje, la crónica, la crítica, el comentario, el editorial, la entrevista, la tertulia, el debate, la cuña, el deporte…